¿Es Chernobyl, es Pripyat? No, es Kadykchan: la ciudad de los sueños rotos.

Ciudad de Kadykchan.

No se trata de Chernobyl ni de la ciudad de Pripyat, en esta ciudad ni siquiera hay ningún tipo de foco radioactivo ni peligro de contaminación tóxica. Incluso podríamos hacer la maletas e ir ahora sin ningún problema a vivir en esta ciudad. No hay motivos para no hacerlo. Lo que pasa, es que esta ciudad aparentemente prospera y duradera, se ha convertido en desolada e inútil, después de la caída de la Unión Soviética.

Kadykchan

Kadykchan, se encuentra en el Óblast de Magadán y todos nos preguntamos ahora donde demonios es este lugar, pues bien, el Óblast de Magadán, se encuentra en el noreste de Rusia, más cerca de el estado de Alaska que de la cápital Moscú, y con una distancia relativamente próxima al Círculo Polar Ártico.
Fundada en 1937 como un pueblo minero dedicado a la extracción de estaño, fue despues de la II Guerra Mundial, cuando conoció su mayor explendor debido a la mano de obra gratuíta de los prisioneros de guerra de la Rusia estalinista.
Fueron estos mismos presos quienes construyeron los primeros cimientos de  de lo que sería una ciudad minera del tamaño de Manhattan, evidentemente, nunca llego a ser lo que en un principio se creyó.



El máximo esplendor de la ciudad, se dio en los años 80, cuando la ciudad alcanzo la cifra de los 10.000 habitantes, pero con la caída de la Unión Soviética y la irrentabilidad de las minas provocaron el declive irreversible de la ciudad.

Parque del dentro de la ciudad.

En el año 1996, cuando la localidad tenía seis mil habitantes, una explosión en la mina, mató a seis personas y provocó el cierre definitivo de las instalaciones, lo que vienes siendo la fuente de ingresos principal de la ciudad. Este cierre tan inesperado de las instalaciones produjo el final de la localidad. La práctica localidad del Estado a nuevas viviendas en otras poblaciones, y el éxodo dejó atrás decenas de edificios convertidos en carcasas vacías.

Bloques de viviendas vacías.

Pabellón olímpico.

En la actualidad, Kadykchan tiene poco mas de doscientos habitantes según el censo ruso. Los testimonios que llegan de los visitantes, sin embargo, no muestran a nadie, y sí una terrible desolación, esa sensación fantasmagórica que provocan los lugares abandonados y que los hace tan inexplicablemente atractivos.

Vistas de la ciudad.

Vistas desde una de las habitaciones vacías de la ciudad.

Montón de libros abandonados.

A diferencia de lo que sucede en Pripyat, es completamente seguro permanecer en la ciudad, salvo por el hecho de que se cae a pedazos en su mayor parte tras década y media abandonada casi en su totalidad. Colegios y edificios permanecen todavía con libros, ropa, recuerdos y restos de las vidas de la gente que allí creció y vivió.

Montón de revistas de la URSS

Tocadiscos.

Aula de un colegio.